domingo, 28 de agosto de 2022

INVITADOS

 


El domingo pasado la invitación de Jesús es la de un puerta estrecha que conduce al banquete del Reino. Quedarse fuera depende de nosotros. El que vive en la injusticia desconoce el don y no es digno pues desprecia al prójimo, a quien Dios nos manda amar como a nosotros mismos.

Hoy Jesús está en un banquete con gente rica e importante. Un jefe de los fariseos lo invita y todos lo vigilan. Estos hombres, pendientes de puestos, cargos, prestigios, honores, quieren estar cerca para escuchar bien, ser protagonistas y espiar a Jesús. Él aprovecha para recordarnos varias cosas:

1.- Es gozoso sentirse invitado. Si te invitan es que eres importante para el anfitrión.
2.- Que es desde la gratuidad donde uno espera cual es su lugar. No busca cada uno donde ponerse, sino que es el que invita quien te indica donde sentarte. Es una lección de buenos modales y de humildad
3.-. Desde la gratuidad descubrimos la grandeza de la vida que no se vive para ser compensados o tener réditos, o esperar resultados, eso es egoísmo
4.- El criterio de Dios es diferente del nuestro. El pone en primer lugar a los últimos, los que no cuentan ni valen, los pobres e indigentes
5.- Que gozo saber que estamos invitados. El Señor es quien nos invita, tiene preparado el banquete y será la gran fiesta de los benditos. Dichosos nosotros si vivimos así.

María es la mujer humilde que nos enseña este camino.

Feliz domingo

domingo, 21 de agosto de 2022

LA PUERTA DE LA VIDA


 Un hombre le pregunta a Jesús cuantos se van a salvar, una cuestión exclusivista, porque si unos se salvan otros se condenan. Y Jesús le habla de una puerta, de que hay detrás y quien puede elegir quedarse fuera, aunque fuesen de los que comieron y bebieron con el Señor. 

La propuesta de Jesús es abierta, inclusiva, universal y esperanzadora. Porque la puerta es estrecha y quien la elije sabe que es exigente. Una puerta que abre paso a un banquete en que todos los pueblos son congregados. Todos son atraídos. Todos son bienvenidos. Un banquete sin excluidos, todos hermanos. 

Al cerrarse la puerta algunos pretenden entrar. Los desconocidos, los que se autoexcluyeron porque eligieron la injusticia. 

Feliz domingo
Xabier Alonso

martes, 16 de agosto de 2022

SAN ROQUE TRAE PARAUGAS


 Desde a festividade do Corpus non caera unha pinga do ceo. Non é algo extraño, pois estamos no verán. Nestes pesados e cansinos meses as medias de temperatura foron notablemente superiores ao normal, a isto sumamos os ventos secos e a baixa humidade, así como os incendios que están a levar por diante centos de hectáreas. O bombardeo das noticias desoladoras, como son a guerra e os problemas da economía, e non esquezamos unha xeración de políticos que aínda crea mñais inseguridade. Neste marco foron pasando os días e semanas e vendo cara ao ceo "de onde me virá a axuda"

Relendo a situación moutros lugares do nundo atópome con algúns datos: na zona africana de Somalia, Etiopía e Kenia levan a maior seca dos últimos 40 anos, despois dunha praga de langosta que rematou coas colleitas, están en fase de comezar a fame extrema preto de 20 millóns de persoas; na Amazonía quéimanse milleras hectáreas de selva para a implantación de cultivos masivos, isto supón a expulsión e masacre dass poboacións orixinais, a desfeita do terreo é bestial; a fraxilidade de moitos países dependentes do comercio de cereais procedentes da Ucraína está a facer que pasen a estar dependendo das estratexias políticas de Rusia e China; África segue a ser a tarta que se reparten as potencias para seguir aproveitando os seus recursos. 

E nós seguimos a vernos como vitimas e considerando que estamos a sufrir o indecible!!! Permitirme que unha vez máis elevemos as pregarias a San Roque, que veu co paraugas debaixo do brazo e trouxo un respiro e unha pouca choiva. Pero non so, como vimos de facer estas semanas pedindo o don da auga do ceo, senón a ter a sensibilidade que el nos mostra de estar preto dos que máis padecen. Saiu polo mundo a peregrinar e foise unindo a aqueles que vivñian baixo o estigma da enfermidade. Tempos recios e duros de pestes e miserias nos que san Roque amosou un corazón cheo de amor para os que sofren.

Hoxe podemos dar grazas por este respiro, pero sigamos rezando, non so por nós, senón por todo este mundo tan necesitado.

Hoxe na parroquia de Prado da Canda teremos a Misa ás 11 da mañá en honor de San Roque

Deixovos a oración para pedir a choiva e que compuxo San Paulo VI


Oración de Papa  Pablo VI para pedir la lluvia

 

Dios Padre Nuestro, Señor del cielo y de la tierra.
Tú eres para nosotros; existencia, energía y vida.
Tú has creado al ser humano a tu imagen y semejanza,
para que, con su trabajo,
haga fructificar las riquezas de la tierra,
colaborando así a tu creación.
Somos conscientes de nuestra miseria y debilidad.
Nada podemos sin Ti.
Tú, Padre Bueno,
que haces brillar el Sol sobre todos y haces caer la lluvia,
ten compasión de cuantos sufren
la carencia del agua y la sequía.
Escucha con bondad las oraciones
que tu Iglesia te dirige con confianza,
como escuchaste las súplicas del Profeta Elías,
que intercedía a favor de su pueblo.
Haz que caiga del cielo sobre la tierra árida,
la lluvia tan deseada, para que renazcan los frutos
y se salven los seres humanos y los animales.
Que la lluvia sea para nosotros el signo de tu gracia y bendición.
Así, confortados por tu misericordia,
te rendimos gracias por todo don de la tierra y del cielo,
con que tu Espíritu satisfaga nuestra sed.
Por Jesucristo, Tu Hijo, que nos ha revelado tu amor,
Fuente de Agua Viva que brota hasta la vida eterna. Amén.
 


lunes, 15 de agosto de 2022

ASUNCIÓN


 Posiblemente sexa este día o que máis festas hai ao longo da xeografía. Coinciden as vacacións de verán coa Pascua de María. Unha celebración chea de ledicia e cun desexo fondo de queremos felicitar á Nai de Deus. 

Todos temos asistido nalgunha ocasión a unha homenaxe. A persoa a quen lle facemos un agasallo, pómoslle unha placa, ou faise unha cea con discursos ensalzando o bo facer. Todos vemos os premois que se dan a unha vida entregada, os Nobel, que poñen na primiera plana a homes e mulleres entregados a unha causa, creativa ou científica; vemos os premios Princesa de Asturias e nos congratulamos nas felicitacións.

A María, tan lonxe no tempo e tan nosa na experiencia, non somos nós quen tomamos a inciativa de ensalzala, senón o mesmo Deus. Poderiamos por os mellores mantos, sacar as xoias, dedicar grandes motetes e cantos, poemas e salmos de gloria, e o facemos con todo o noso cariño, pero nós so seguimos o que Deus xa realizou en plenitude. Ela foi elevada ao máis alto, ensalzada polo mesmo Señor e Dono da vida, resucitada e partícipe da gloria no ceo. Pero o máis apaixoante, non é que nós queiramos facer o mesmo camiño por imitación, senón que deixemos como María, pondo o mellor de nós mesmos, que Deus faga en nós, como Igrexa, o camiño e o proxecto de gloria e vida ao que nos ten chamado.

O que se humilla será elevado... e iso consegue María sendo sinxela e humilde.
E nós, como ela xa anunciou, proclmámola ditosa, benaventurada, feliz... e iso somos nós chamados a vivilo. 

Moitas felicidades
Xabier Alonso

domingo, 14 de agosto de 2022

HE VENIDO A TRAER DIVISIÓN

 


Cuando nace Jesús el mundo conocido vive una época de paz. La conocida pax romana fue un largo período de prosperidad del imperio, desde el año 29 antes de Cristo y hasta finales del siglo II. Un tiempo en el que no hubo luchas armadas internas, ni guerras civiles, ni grandes conflictos con otros pueblos. Pero, a pesar de que el emperador Augusto había cerrado la puerta del templo de Jano, dios de la guerra, existían claras actitudes que irían en contra de una situación realmente pacífica. Por ejemplo, en el año 70, Roma destruye Jerusalén, y con ella su templo, llevando consigo todos sus tesoros. Dentro de toda la magnitud del imperio no dejaba de ser un hecho puntual. Por eso de la pax podemos decir que tenía cierta relatividad. Vemos que era la pax impuesta y que favorecía además la imposición de un estilo de vida, el comercio y la lex romana. Pax acompañada de progreso, evidentemente dentro del marco de intervención, también militar de Roma.

Esta paz es la que nosotros podemos estar reclamando en un mundo que no vive en un abierto conflicto mundial de forma bélica. No estamos en situación de clara guerra como sucedió en la 1ª o 2ª guerra mundial. Pero, en un mundo global y al mismo tiempo fragmentado, vemos con estupor como se cumple lo dicho hace años por el papa Francisco "asistimos a una 3ª guerra en fragmentos". La globalización hace que las situaciones de conflicto internacional tiene consecuencias mundiales: comercio, desestabilidad económica y política, inseguridad, que trae consigo una narrativa de miedo y fragilidad que provoca dos consecuencias: evadirse y dejarse llevar por la indiferencia o encerrarse en el castillo de poder. Una narrativa que muchas veces no va al trasfondo de la realidad, sino que se queda en la historia individual que pretende emocionar, pero no convertir. Hemos pasado del impulso emotivo ante la huida de ucranianos y con iniciativas de rescate a una ausencia del rostro de las víctimas en este conflicto.

Jesús proclama "he venido a traer fuego" "vengo a traer división" y esto no nos deja indiferentes. El es el motivo, su palabra y acción, su decisión de que Dios mismo irrumpe en la realidad y la condición humana, no puede dejarnos como si nada sucediese, ni nada cambiase. Así, el Jesús profeta, que denuncia con el amor y el perdón la violencia del hombre trae división, pues provoca en el corazón delas personas la evidencia de que estamos lejos de lo auténticamente humano. Cuando Jesús es provocativo con su palabra y su acción, cercano a los quienes los hombres desprecian, compasivo con los que son juzgados pecadores, misericordioso con los que no cuentan, y rescata a las personas de su dolor haciéndoles experimentar el amor de Dios, está haciendo que el mundo arda en el Espíritu de Dios, en su amor. Acoger a Jesús es aceptar a quien nos recibe. Hacer nuestro a Jesús es duro, pues evidencia nuestras incoherencias y saca a luz nuestra fragilidad y nos abre al reto de esperar contra toda esperanza. 

En el camino del discipulado no es fácil decir sí a Jesús, pero contamos con su gracia, con su amor. Necesitamos reconocer las fragilidades de nuestras divisiones para que, desde el reconocimiento, caminemos hacia la unidad que nace en el misterio pascual.

Feliz domingo 

domingo, 7 de agosto de 2022

DECIR SI DESDE LA LIBERTAD


 Si el domingo pasado, Jesús nos prevenía para que no cayésemos en la codicia, descrita por San pablo como una idolatría, hoy, el Señor, a través de diversas parábolas nos invita a pasar a la otra orilla, o amanecer a un nuevo día de esperanza con la libertad de la generosidad. Lo que nos esclaviza envuelva el corazón en la noche del vacío y la limitación de no alcanzar nunca los deseos insaciables que se instalan en él, lo que nos libera provoca la entrega de nuestra propia vida, condicionar el futuro a lo imprevisible de estar a disposición de los demás, descubrir el tesoro en el amor que no se agota. 

Nos invita Jesús a estar en vigilia, preparados, dispuestos, atentos, a saber dar respuesta de nuestra fe, como diría San Pedro, a todo el que nos la pida. Y es que el que está en labor constante y diario, no está programado para realizar lo que se le pide, sino también de sacar lo mejor de si mismo cuando se necesita. No valen las escusas de yo no se, yo no valgo, yo no puedo, yo no... esto es anular todo posible avance, y va en contra de la esperanza. Lo sorprendente es que, sin saberlo, el Señor viene a ponerse a disposición del servidor, se cambian los papeles en la libertad del Dios que se hace ofrenda, se sitúa en el segundo plano, mira desde abajo, da de comer y cuida de los suyos.

Hoy nos unimos a todas las personas que procesionan alumbrando al Santísimo Cristo de la Victoria de Vigo. Procesionar es caminar, hacerlo juntos, siguiendo al Señor; alumbrar es caminar llevando luz, amor y alegría. 

Feliz domingo

jueves, 4 de agosto de 2022

PERDOADOS NO AMOR


 Necesitamos espazos de encontro, escoita, acollida, comprensión e perdón. E isto é o que desexo cada día que poida ser as nosas parroquias e o santuario da Virxe María. Por esta razón, hai dez anos, o noso pequeno recuncho do mundo, este antigo santuario da Franqueira ten unha ollada ampla e universal. A Penitenciaría Apostólica concedeu o 24 de abril de 2012 o Vínculo Espiritual coa Basílica papal de Santa María a Maior de Roma. Deste xeito, os peregrinos e devotos da Franqueira poden vivir en determinadas datas o gozo da Indulxencia Plenaria. Neste día, en que se celebra a Festividade da Dedicación da devandita basílica, coñecida a súa festa como a Virxe das Neves, estamos unidos a través da celebración gozosa da Reconciliación e a Eucaristía. 

De qué me teño que confesar? Eu xa me confeso con Deus. Eu non teño pecado. Non necesito contarlle os meus pecados a un home como eu. Son frases ben coñecidas por todos e que miñaron de tal xeito a nosa cotianidade que fomos facendo do Sacramento un extraño patíbulo no que colocamos con anguria os nosos pesares e defectos e nos flaxelamos impetrando perdón ao xuiz. Lonxe de tal. Antes de nos adentrar no agobio de sabermos que rompemos os vínculos de amor con Deus, cos irmáns e coa creación, Deus xa está ña nosa espera. Antes de esbozar un lamento por sentir o silencio da nosa perda interio, xa o Pai Bo está susurrando un "Quérote". Antes de manchar as nosas mans de violencia e rexeitar o camiño de encontro humano, xa o facedor do ben está a abrir as súas mans para abrazarnos na paz. 

O sacramanto da Reconciliación, do Perdón, da Penitencia, da Confesión... pois mira que ten nomes e ben bonitos... da Paz... ten o centro na Misericordia, no Corazón entrañable e maternal do noso Deus. El non cansa de nos perdoar, non agota a súa piedade connosco, non alonxa o seu corazón dos seus fillos. 

Por qué logo teño que confesar? Porque o Corpo de Cristo, a Igrexa, dóese de que os fillos estean tristes, de que os seus membros estean doentes e o Bo Samaritano quere sandalos co consolo e a paz. Falar do corazón non so é terapéutico, senón que a acción do Espírito Santo é provocativo, provoca en nós un efecto saudable. O Misterio do seu amor adéntrase de tal xeito en nós que nos fai recuperar a beleza e a frescura do amor primeiro, a vitalidade de quen se abre a esperanza. Porque necesitamos celebrar en comunidade que somos fráxiles, vulnerables, débiles, ante un mundo prepotente que se pensa ser os mellores para dicirlles co testemuño da reconciliación que sen El non podemos nada e que todo somos en El.

Vémonos no altar do perdón irmáns.

VOULLE PRANTAR LUME A TÚA CASA


 "Voulle prantar lume a túa casa"
Imaxina por un intre que estas verbas ameazantes foran para ti. Rápidamente, sen pensalo, estaría cheo de medo e buscando o xeito de que nada das túas pertenzas sufriran dano. Saerían dunha boca cargada de odio e violencia e sentiríaste ameazado e medoñento. 
Hoxe, centos de hectáreas de monte, e moitas propiedades, xa sufriron a violencia do lume. Este ladrón que non deixa nada e que arremete con furia contra todo. Levamos un verán cunha temperaturas fora do normal, pero cunha falta de conciencia que resulta desmoralizador. Apagar os lumes desta tempada fumegueira son millóns de euros de gastos, que ben poderían ser revertidos nunha lexislación máis axeitada de coidado do mundo rural. Un rural que non so é esquecido e abandoado, senón que o urbanita, con todos os repectos, está amparado baixo unha bóveda de protección que o aílla de tantos problemas da natureza. Pasa a ser consumista de lecer no entorno natural e ecolóxico e volve ao seu fogar de consumo no que o que pase nos montes moitas veces nin se entera. Por certo, quero engadir, que non estaría de máis que algúns camiñantes que veñen á aldea teñen ollo do que deixan tirado, e que nesta situación de alerta busquen outros roteiros alternativos. 
Seguindo co título escollido quero dicir, que hai quen está a prantarlle lume ao noso fogar. O monte non é so unha fonte de recursos, é a identidade da nosa terra, o que nos configura e dános o feito do que somos. A casa común que está a desaparecer despois de tantos esforzo da veciñanza por sacar adiante un lugar no que vivimos e que é doado, somos administradores dun tesouro que vai medrando por si mesmo, e nos agasalla cada día co frescor, coa forza que sae das entrañas da terra e fai abrollar veas de auga que, desde as nosas terras chega ás billas dos fogares. Unha terra na que erraízan os carballos e castiñeiros, os bidueiros e os amieiros, unha montaña que nos fala de forza da pedra e da fraxilidade da herba. É a nosa casa, a que nos veu nacer e a terra na que están eterrados os nosos. A terra que sacou adiante aos fillos famentos dos labregos e gandeiros, que fixo das ponlas grosas o cerne das tarbes dos tellados e os pisos dos fogares, que queceu a lareira e co seu toxo e os seus fenteiros estrumou as cortes do gando. A terra do sacrificio e do lecer, do traballo duro e da festa na carballeira, no outeiro que bate o vento e o neboeiro que da frescor no amencer quecido. A terra, é a terra, que do verde esperanzador vóltase negro do loito, duro e tristeiro. 
Non esquezas de onde ves para saber a onde poderás chegar.
Esta é a nosa casa, onde fomos criados e onde seremos soterrados. Non é tempo de morte, non é tempo de loito, é tempo de erguer a ollada e pedirlle ao ceo: chora. Chora connosco bágoas de esperanza, e pide que chova, que o ceo chore para nacer de novo a vida.

Xabier Alonso