Este sábado, a las 6, iniciamos una peregrinación espiritual de nueve días junto a María nuestra Madre, en la advocación da Virxe da Fonte da Franqueira. Una invitación, desde este faro de fe que se extiende por todas las tierras de nuestra diócesis, para unir nuestras vidas en una sola plegaria agradecida y confiada. Desde este día, y serán nueve, María nos convoca como al colegio apostólico en oración desde la Ascensión del Señor hasta la efusión del Espíritu santo en Pentecostés. Nos relata el libro de los Hechos de los Apóstoles que estaban en oración con María y algunas mujeres. Hoy, como hace 2.000 años, María nos reúne en oración. ¿Qué es orar? Tomar conciencia de nuestra propia vida ante Dios y dialogar con él deseando su respuesta que es renovadora y reconfortante. Comenzamos este camino, esta peregrinación con esta idea: reunirnos, ser comunidad, pueblo santo, pues Dios nos santifica en el bautismo, pueblo en camino, pues no somos estáticos; en esperanza, pues nuestra mirada es de futuro; en caridad, pues queremos vivir como hermanos y hermanas.
Esta tarde, comenzando esta novena, deseamos ser en Jesús, realizar un camino de santidad y de vida. No somos huérfanos, ni nos quedamos abandonados sin conocer la realidad de nuestra existencia. Permitidme pues, que apunte algunas cuestiones que considero importantes:
1.- Somos con los demás. Desde que nacemos somos frágiles. Necesitamos de los cuidados de los que nos aman. Más aún, la vida, es un don gratuito que nos es dado. El orgullo con que nos situamos ante la vida debe ser derrotado por la humildad de ser y situarnos como servidores de la vida con los hermanos. Vivir es un reto en el que tomamos conciencia de saber afrontar cada dificultad o problema que se nos presenta con rectitud de corazón y valentía. Y nos necesitamos, la sabiduría de unos ayuda a las incapacidades de otros, nos complementamos, nos apoyamos y nos solidarizamos con las dificultades de los que se sienten más débiles. Ser hermanos y hermanas, crea vínculos de ayuda mutua que nos enriquecen y descubren los valores y capacidades para ser cada uno una respuesta a los retos de la vida.
2.- Somos en camino. Dentro de poco más de una semana miles de personas peregrinarán a este santuario. ¿qué buscan? ¿qué necesitan? Saciar su sed de comunión y de amor, de vida y concordia. Los apóstoles estaban llenos de miedo, encerrados en el cenáculo, y María les invita a orar, a ponerse a disposición de Dios, a esperar en el amor, a no pensar en sus cosas, sino en las de Dios Padre amoroso. ¡Con qué cariño maternal María estaría escuchando a cada uno de los apóstoles! Así, hoy, esta Iglesia, reunida en torno a esta imagen, desea poner sus inquietudes, la de sus familias, la se su corazón. Cuando canta "ven con nosotros al caminar" le decimos a nuestra Madre que reconocemos que ella ha hecho antes este camino de la fe, y que espera, sí, espera la fecundidad de Dios que nos engendra como hijos e hijas en su amor para llevar la paz y el bien a todos.
3.- Esta tarde tendremos la oportunidad de escuchar el primer testimonio de fecundidad maternal. El de Mariluz, una trabajadora de la residencia de las Esclavas de la Virgen Dolorosa de Crecente. Durante estos años de pandemia, que no se ha terminado, muchas personas ha n estado al servicio de los últimos. Esta en una actitud de escucha está inscrito en el ADN del ser cristiano. Escuchar es abrirse a las inquietudes del otro, pero sobre todo, acoger la palabra de Dios ha dispuesto para nosotros en la realidad de la vida.
Hoy iniciamos este camino de fecundidad en el que Dios ha puesta la semilla del amor en nuestros corazones.
Xabier Alonso
Me uno a este camino espiritual com todos vosotros y com Nuestra Señora desde Brasil...
ResponderEliminarMuchas gracias. Que importante es para cada uno de nosotros sentirnos parte del pueblo de Dios; participar de la comunión de los santos con nuestra humilde oración.
ResponderEliminarQue nuestra señora de la Franqueira nos ilumine para ser en la medida de nuestras posibilidades luz, alegría y salud para los que nos rodean. Abrazos para todos