DIA 4; ESFUERZO

 

Hoy valoramos los ejemplos de superación de personas abocadas al fracaso o a quedarse al margen y que consiguen nuevos objetivos logrando superar las barreras más increíbles. Esfuerzo que nace de una visión positiva de la vida, constancia  para ir valorando cada paso que se avanza, vínculos que provocan efectos positivos en la persona, éxitos que se ven recompensados por la admiración de los demás. Vemos como en ese mundo de relaciones interpersonales que provocan la apertura a los demás logran que valga la pena luchar.

Hoy María nos ayuda a crecer en el esfuerzo de cada día. ¿Has visto alguna vez a una madre que no valore el esfuerzo de sus hijos? Pues ella, las madres, saben lo que es el trabajo de cada día por avanzar y ver madurar a sus hijos. Hoy, María, nuestra Madre, nos ayuda a ver en la superación de cada día la fuerza del Espíritu. Sino ¿caminaría ella por montañas hasta llegar a visitar a su prima Isabel sino fuese por el pensamiento y el corazón puesto en el amor de Dios? Por eso al llegar su esfuerzo se vio recompensado por un efecto de alegría que lo envolvió todo. Bendita tú entre la mujeres... eres la más fuerte, porque llevar la fortaleza de Dios en tus entrañas.

Virgen María,
madre de Jesús y madre nuestra.
Te pido con fe que despiertes en nosotros
el entusiasmo por vivir la vida
que Dios nos ha dado.
Tu vida estuvo llena de contrariedades,
que fuiste afrontando con alegría y gozo interior.
Tu presencia entre los hombres
sembró la esperanza, el consuelo, la alegría
y las ansias de vivir a pobres e indigentes.
Ayúdanos a proyectar en los demás
el entusiasmo y el esfuerzo por la vida
y poder testimoniar esa fuerza interior
que tu Hijo nos da.
Que desaparezca el pesimismo de tantos hermanos
y entre todos construyamos
el reino de la alegría, del amor y de la paz.