viernes, 20 de julio de 2018

MISERICORDIA



Si algo vemos en Jesús es la capacidad de dar respuesta a los corazones endurecidos por la ley y que no son capaces de ver el sufrimiento de los hermanos. Los fariseos buscaban la salvación en la ley y su cumplimiento. Su convencimiento venía, entre otras cosas, de ver que los mandatos del Señor, dados a Moisés, son inquebrantables. ¿Cómo ir en contra de la voluntad de Dios?. Pero surgen las excepciones, que no vienen de la ley, sino de la debilidad del hombre que busca la justificación en si mismo. 
Las discusiones de los fariseos con Jesús no son accidentales, sino que es la toma de postura para las decisiones.
Si escojo la misericordia la ley del amor es mucho mas exigente que el cumplimiento de un mandato. Porque lo que pongo no es salvarme de que todo sea conforme al legislador sino a favor de quien está puesta la ley. Puedo pensar que es bueno, santo, y me hará bien hacer oración... pero si entro en la iglesia, como pude ver hace unos días con asombro, después de haber venido en coche ex profeso a visitar el santuario, entro dos minutos y salgo. ¿He rezado?, Supongo que algo sí, ¿Pero a esto lo puedo llamar oración?.Pues, francamente, no. 
Puedo pensar que bueno es visitar a un enfermo. Voy, lo visito, y hablo de mí, de mis cosas, de mi familia, mis problemas, mis achaques, mis enfados, mis cosas... y no escucho al enfermo, a su familia, no les animo, nos les transmito esperanza. ¿Le he visitado?, por supuesto. ¿He sido misericordioso?, pues que quieres que te diga.
Pongamos en el centro la misericordia que viene del corazón entrañable del Padre.


Evanxeo: Mt 12, 1-8
Naquel tempo pasou Xesús nun sábado por unhas leiras traballadas. Os seus discípulos sentiron fame e empezaron a arrincar espigas e comelas. Os fariseos, vendo aquilo, dixéronlle:
-Mira que os teus discípulos fan o que non está permitido facer no sábado.
El contestoulles:
-¿Seica non sabedes o que fixo David cando sentiu fame el e mais os seus acompañantes? Entrou na casa de Deus e comeu pan do ofrecido, cousa que non lle estaba permitida a el nin ós seus acompañantes, senón só ós sacerdotes. ¿E non tendes lido na Lei que os sacerdotes no templo quebrantan o sábado sen por iso seren culpables? Pois eu asegúrovos que aquí hai algo meirande có templo. Se entendésedes ben o que significa: Misericordia quero e non sacrificios, non condenabades a estes inocentes. Porque o Fillo do Home é Señor
do sábado.

Feliz día
Xabier Alonso
20/07/2018




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