Mateo 22,1-14
1.- La gratuidad no está de moda, parece que todo tiene un precio. El prestigio es una categoría a mantener y a veces a base de pagar favores. Las amistades pueden ser convenientes, nunca sabes cuando te harán falta. Las influencias son un requisito para crecer. La hipocresía está al orden del día. Las ideas y las convicciones tienen un precio bajo y se pueden cambiar fácilmente.
2.- La parábola de los invitados a la boda que nos relata el evangelio de hoy deja en evidencia nuestras opciones. No es extraño que también nosotros pongamos excusas a no acudir a la boda de su hijo. Son excusas bien sencillas y que siguen de actualidad a la hora de optar por el Reino. Son excusas como las que escuchamos muchas veces "soy creyente a mi manera, rezo cunado me apetece", "una cosa es la fe y otra la vida", "para creer no tengo que ir a Misa", "yo voy cuando me conviene"... y podríamos relatar muchas más.
3.- Finalmente quienes fueron invitados son los que viven la gratuidad, los que caminan por la vida, los que están en la encrucijada esperando. La sala del banquete se llena de los que acogen la palabra de los criados del rey. Son los creyentes que debemos salir a anunciar a todos que somos llamados a participar de este banquete.
Nosa Señora da Franqueira, ti que tes as portas do teu fogar sempre abertas e nos convidas a sentar no banquete do Reino, axúdanos a estar ben dispostos co traxe de festa da ledicia e da misericordia
Feliz día
Javier Alonso
A Franqueira
18-08-16
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