El conflicto entre la palabra y acción de los fariseos y Jesús ya es una brecha abierta. No solo entra en juego la decisión de qué hacer ante determinadas situaciones, sino, el que lo que se hace procede del mandato del Señor. Está en juego, ¿puedo pasar por encima de la Ley de Dios para salvar al hombre? Fijaos que el debate, en el que no entran los fariseos que permanecen callados, está en la vida o la muerte. El enfermo de la mano seca, signo de que por esa extremidad ya no hay vida, solo con su presencia, cuestiona las decisiones que podamos tomar. Optar por una u otra no deja indiferente, sino que supone, la vida o la muerte. Y los entendidos de leyes permanecen en silencio.
Jesús opta por la vida y está significado en el hombre que recupera la vida en su mano.
La opción de los fariseos es la muerte y queda patente en la confabulación para matar a Jesús. Los defensores del precepto de guardar el sábado, ahora, trabajan en sus corazones de piedra como acabar con Jesús.
Danos la fuerza de tu Espíritu, Señor para decidirnos por la vida.
Haznos custodios de la vida que tú nos das
Feliz día
Xabier Alonso
23-01-2019
Evanxeo: Mc 3, 1-6
Volveu entrar Xesús na sinagoga e alí atopou un home que tiña a man tolleita. Toda
a xente estaba observando a ver se ousaba curalo en sábado, para o
poderen
acusar.
Entón díxolle Xesús ao home da man tolleita:
--Érguete e ponte no medio.
E preguntoulle a eles:
--Que está permitido no sábado: facer o ben ou facer o mal, salvar a vida ou
deixar morrer?
Eles calaron.
Xesús, botándolles unha ollada chea de carraxe e tristura debido á
dureza do seu corazón, díxolle ao enfermo:
--Estende a túa man.
El estendeuna, e a man curou. E xa ao saíren da sinagoga os fariseos empezaron a
maquinar cos herodianos no xeito de acabar con Xesús.
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