Hay muchos tipos de lepra. Socialmente colocamos a muchas personas fuera del ámbito de relaciones. Basta ver como se abren los ojos cuando alguien se viste fuera de los cánones establecidos. Por supuesto, se nos llena la boca con palabras como libertad o tolerancia. Las diferencias no las vemos como riqueza de en el pluralismo, sino estorbo en el deseo de que si las cosas son como digo yo, que le saco partido, entonces funcionan. Esto, aunque no lo digan, lo piensan muchos dirigentes sociales, económicos o políticos.
El evangelio nos abre a la perspectiva de acoger y sanar al despreciado, al que se expulsa de la sociedad. La opción evangélica de la Iglesia no puede ser otra que la que tomó Jesús.
Hoy, Señor, dame coraje para ver con tu mirada, abrazar siendo hermano.
Feliz día
Xabier Alonso
17-01-2019
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